DESDE UN MATRAZ ERLENMEYER / PALABRAS QUE SON EXPERIMENTOS / ERRORES
BIEN HECHOS / EVAPORACIÓN DESCONTROLADA / MEZCLAS ATÓMICAS O NUBES /
BIENVENIDOS AL LABORATORIO DE ESCRITURA CREATIVA.


08 junio 2009

Reminisencia

El miércoles estaba a punto de entrar cuando mire a mí alrededor y la vi. Estaba sentada en el piso, contra la pared. No se si esperaba algo, no se si esperaba a alguien, ni cuánto tiempo, ni por qué, pero estaba ahí, ocupando un espacio en la soledad de un piso sucio y transitado. Sin duda había mucha más gente en el pasillo, pero ella tenía su propio mundo, todo gravitaba en torno a su orbita. Descubrí que ella solo estaba por que estaba. Con un morral de tela verde entre sus piernas cruzadas, el pelo suelto, la mirada perdida, una pollera larga y una remera holgada. Ella esperaba la no respuesta(si eso es posible) del destino. Decidí, sin la menor duda, como debe hacerlo un hombre, mi condena. Me dije -Heme aqui nuevamente frente a mi infierno-. No hay infierno que a lo largo de una vida, no se repita varias veces. Como hombres, por elección, por el hecho de vivir, vivimos un sinnúmero de infiernos. Mi infierno es la mujer, su esencia irrepetible, la naturaleza transgresora, la liebre libre entre los lirios y entre la hierba roja.

No es la misma, no es otra, es simplemente ella, su estar sentada en un piso sucio y transitado, su gravedad que me obliga a mirarla. Es la hija de la mujer primigenia, la hija de la madre. Esperando volver a nacer por última vez me acerqué y le dije mirándola a los ojos esmeralda.
-Hola. Hoy apareciste, y por fin te recordé

Alan Ojeda
--------------------------------------------------------------------------------------
Subo lo del miercoles pasado.

1 comentario:

  1. A mí me agrada decir que la mujer está por fuera de términos eclesiásticos como infierno y cielo. No es para reprochar lo escrito, yo mismo los uso como lugares comunes, pero es lo que me pasa por la cabeza cuando voy al tema en profundidad.
    Su escencia es irrepetible y transgresora a mis ojos de varón, y que con su rebeldía particular, basada en decirnos a los chicos cosas que nos cuestan sacar, nos hace recordarlas una vez más cada vez que aparecen.
    Y por suerte, cabe el viceversa en esto.

    ResponderEliminar